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domingo, marzo 21, 2010

Ecobici

Estamos estrenando un nuevo sistema de transporte que han implantado aquí en la delegación Cuauhtémoc de la Ciudad donde vivimos, esto es para impulsar el uso de la bicicleta copiando a algunos países que ya lo han hecho con éxito.



Nosotros inmediatamente nos informamos e hicimos lo requerido para inscribirnos a este programa. Todo se hace por internet usando una tarjeta de crédito para garantía. Después de hecho el trámite, tardó en llegarnos la tarjeta como 10 días. Curioso que en cuanto las empezaron a instalar (como camino con frecuencia en la zona y soy observadora), pude ver que algunos privilegiados (seguramente del gobierno, familiares o amigos), las usaban desde que se instalaron las paradas para estas.

Todo se ve muy profesional y así espero funcione con algo de tiempo, porque entiendo que las cosas no pueden ser perfectas al principio. Llegan nuestras tarjetas y enseguida las tratamos de activar pero la mía no se activa, por lo que tuvimos que hacer varias llamadas, comprobar datos, etc. y finalmente queda resuelto. La atención de los muchachos que contestan, es muy amable pero poco claro, así como se maneja el idioma aquí en México. Después de darle algo de vueltas al asunto, lo resolvimos.

Se viene este puente que ahora se adelantan y se atrasan según conveniencia, por lo que en vez de ser el día 21 de Marzo, se hizo festivo una semana antes. Leemos las instrucciones y el domingo anterior nos lanzamos por nuestras bicicletas aquí en una de las muchas paradas que hay en La Condesa y nos vamos rumbo a Reforma.
Como era domingo, llegamos a Reforma con poco tráfico y como la media hora (que es el máximo que puedes tener esta bicicleta) se terminaba, la dejamos y esperamos los 10 minutos que se supone hay que esperar para tomar otra.
Tardó un poco más, pero sacamos otras y nuevamente continuamos nuestro recorrido por Paseo de la Reforma hasta Ave. Juárez regresando al Jardín del Arte en Sullivan. Allá volvimos a dejar nuestras bicicletas en la parada de Villalongin.

En este recorrido, realmente disfrutamos ver cómo mes con mes se incrementan los ciclistas, patinadores, y personas que disfrutan en diferentes vehículos rodantes el cierre total a la circulación de automóviles que se lleva a cabo los Domingos de esta zona de la ciudad.
Siempre nos ha entusiasmado la bicicleta y a mi incluso la motoneta, en la que me moví en el pasado por 7 años, cargando niño, super, violín, etc.
Ojala se incremente el uso de estas bicicletas, pero ojo, hay que checar cuando se devuelven, que el foco no parpadee, porque nuestra segunda entrega no fue tan exitosa. En la parada de Villalongin frente al Jardín del Arte, no dejaba de parpadear el foco por lo que tuvimos que llamar a ecobici para que hicieran algo, porque si no lo arreglas y se pasan los minutos, horas, etc. te cargan dinero a tu tarjeta. Además que si te pasas 24 horas, te cobran 5,000 pesos lo que es lógico para que no se las roben, pero los errores existen y somos víctimas de las primeras pruebas si no la corregimos en el momento.
Nuevamente el muchacho de ecobici Jonathan, nos arregló el problema, pero perdimos media hora y luego nos dijo que posiblemente no pudiéramos volver a usar otra bicicleta, hasta pasada una hora. Pero al cabo de 20 minutos probamos la tarjeta en Reforma (desconfiando de la parada de Villalongin) y nos permitió volver a tomar por tercera vez otra bicicleta para regresar.
Ojalá le agreguen a las bicicletas un espejo, porque en una ciudad como la nuestra en la que no existe la cultura del respeto al peatón, bicicletas, ni motocicletas, es indispensable.


A propósito de novedades, quiero contarles que ya no veo a Gastón . Lo veía en la calle, en el parque, en el lobby de mi edificio y siempre me daba muestras de simpatía. Es un bonito galgo de tamaño mediano y al correr de los meses lo vimos crecer porque llegó cachorrillo.
Al mismo tiempo que desapareció Gastón, también desaparecieron un par de camionetas del estacionamiento y una de ellas más obvia porque no se movía casi nunca o nunca. Esta estaba justo en el paso de el carrito que usamos los vecinos para subir nuestras compras de supermercado y por ser un vehículo grande y viejo obstruía el paso, pero ahora ya no está.
Resulta que los dueños de Gastón y estos vehículos, fueron asesinados en una de estas camionetas y fue una balacera de estas que siempre nos asustan a aquellos que vivimos en una ciudad tan violenta, pero que habría que analizar con más detalle.

Porque ayer me enteré de que parece que esta simpática y de buen ver pareja dueña de Gastón, se dedicaban a negocios de estos que nadie confiesa, que los que no nos hemos dedicado nunca y ni por la cabeza nos pasa dedicarnos, no creemos que se encuentren entre nosotros ciudadanos comunes y corrientes.
El hombre era un sujeto alto, atlético, rapado a la moda actual o solo con escasez de cabello, pero diría yo guapo. Amable y simpático, con el que conversamos en alguna ocasión de cosas sin importancia.
Ella mucho más joven como se estila en estos tiempos y sobre todo cuando el nivel económico de el hombre (como parecía ser el caso), es bueno o más que bueno. Ella mujer delgada, a la moda, que se ejercitaba y guapa. Pues sí, los mataron a los dos y ahora Gastón no se a donde habrá ido a parar.

Sanuk