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miércoles, marzo 30, 2016

De Vuelta en Tailandia



Aquí voy de nuevo porque la vida me vuelve a traer a Tailandia, éste
tan querido país Asiático donde vivimos mi marido y yo del 2006 al
2008 y donde sin lugar a dudas hemos dejado parte del corazón.
La razón por la que vuelvo (en esta ocasión sola e impulsada por
nuestro hijo nuevamente), es emprender un pequeño negocio culinario.
Todavía no tengo claro exactamente lo que será, pero ya les platicaré
en este blog que vuelve a ser de Aventuras en Asia,  con sus cambios
como la vida misma. Me gusta este cambio que se va dando en el blog
porque  refleja la vida que nos va llevando en muchas de las veces a
vivir o hacer cosas que no fueron precisamente planeadas. Porque
¿quien nos prometió que haríamos con nuestra vida lo que algún día
pensamos? Quien no se sale del camino que se traza, ¿puede ver los
senderos? La única razón de estar aquí en este planeta, es intentar
conocer que hay mas allá de la obviedad.

La permacultura y la agricultura sustentable aunque parecidas en la
finalidad, son diferentes enfoques. La Permacultura esta enfocada en
una ética de vida y cultivo inteligente y sustentable. Esta ciencia
antigua, pero olvidada, fue lo que trajo nuevamente a mi hijo a estas
lejanas tierras.

De entrada me siento un poco como en casa en este bello país Asiático
y comienzo a indagar las posibilidades en materia de comida. Yo no soy
chef ni presumo de nada especial, pero creo tener algún talento por
tantos años cocinando y haciendo mis propios experimentos. Ya  se verá
que sale y mientras tanto  también aprendo algo de todo el tema
referente a cuidar la tierra y comer sano y si se puede, ¿porque no?
Intentar llevar lo cocinado, de la tierra a la mesa. Que mejor que
obtener este conocimiento  de mi hijo y su esposa involucrados con la
Permacultura desde México.

Porque estoy más que convencida de que si hacemos una sola fuerza los
que nos estamos dando cuenta de lo que se avecina, podremos intentar
contagiar a aquellos que inmersos en el sistema supuestamente
"civilizado" vuelvan la vista a estas nuevas propuestas. La mayoría de
la gente vivimos en grandes o pequeñas ciudades de cemento, edificios
que consumen energía de manera desproporcionada que impacta al
planeta. Después  nos preguntamos ¿por qué nuestras casas inundadas
cuando llueve en demasía?, ¿porque la naturaleza nos parece castigar?
Porque los seres humanos  perdimos el verdadero sentido de que es
vivir por completo en los últimos 100 años y solo se piensa en la
acumulación y en el consumo desmedido. ¿Cómo no contagiarte del bombardeo
consumista? Es difícil pero debe de ser el reto para las nuevas
generaciones y las que contribuimos a su descomposición.
La avaricia y el sentido de acumulación, es lo que hoy nos domina.

En el año 2007, estuvimos en Borneo (Malasia) para ir a la jungla y
conocer a sus verdaderos habitantes, los elefantes, chimpancés y
tantas clases de orangutanes originarios de aquella zona (en este blog
hablé de este viaje). Que divertido porque conseguimos ver algunas
lindas cosas, pero que tristeza que desde el avión solo veíamos
palmeras de aceite de coco y la selva, si la vimos, pero nos costó
encontrarla en medio de tanta destrucción.¡Hoy no quiero ni imaginar
cómo estará aquello!

Este fin de semana fui a conocer el lugar donde mi familia está
haciendo el proyecto de permacultura y me sorprendieron los increíbles
progresos que han logrado en este tema.




La cabaña de bambú que pusieron y a la que agregaron cocina y baño
recientemente, ya recibe agua de la pequeña presa y lago que
construyeron el año pasado de forma natural y sin materiales como el
cemento! Solo hay que observar (claro que es toda una carrera en forma
la permacultura) lo que pide la naturaleza y donde es mejor para ésta.
Para que así nos regale esa agua que se acumulará en tiempos de lluvia
para su propio riego en tiempos de secas.


La zona donde está esta granja, nos parece a los citadinos
ciertamente salvaje, pero lo cierto es que no lo es. Aquí también los
monocultivos han hecho de las suyas igualmente (cultivar una sola cosa
o varias, pero en extensiones grandes) y estos son de árboles de
caucho (hule) también codiciado por sus diferentes usos en la "Vida
Moderna."
El de Eucalipto es otro de los monocultivos que observé, porque su
madera al ser muy resistente también tiene mucha demanda. Pero este
árbol en especial sembrado en grandes áreas de terreno, no permite el
crecimiento de otras cosas a su alrededor.

A la ciudad  de Bangkok apenas fui a dar una mirada y solo mencionaré
que a primera vista sigue siendo interesante su jungla humana y claro
incongruente cada vez más a mis ojos.

Sanuk.

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