Mexico si ha cambiado.......

Desde luego que México ha cambiado, pero no ha mejorado.
¿Porque lo digo tan drásticamente?, pues porque a mis 51 años de edad y habiendo vivido la mayoría de ellos en este país, después de haber vivido en Tailandia, hoy que me encuentro de nuevo un tiempo por aquí y lo compruebo.
Cambiamos de un gobierno (al parecer de muchos de nosotros) corrupto, totalitario disfrazado de democracia, a uno que pensamos que haría un verdadero cambio.
Sabíamos que tomaría su tiempo el proceso de entrar en una democracia, pero creíamos que podíamos lograrlo. Hoy no solo se ve muy lejos este "ideal" sino que en algunas cosas es notorio el retroceso. Para muestra un botón:

Es el caso que mi pasaporte se vencería el día 17 de Julio y yo previendo esto porque tengo visa por un año para regresar a Tailandia, fui a hacer un tramite que he hecho toda mi vida desde que tengo memoria, ya que tengo pasaporte desde niña y es la renovación del mismo.
Al llegar con todos mis papeles y mi pasaporte "todavía vigente" a la delegación de Tlaltelolco, todo se veía muy bien como la ultima vez que lo saqué en la ciudad de Toluca (porque vivía por allá) y resultó ciertamente sencillo. Esto fue hace 10 anos, pero era hora de renovarlo según las leyes de mi país.
Al entregar mi pasaporte junto con la tarjeta con la que se vota en este país y que se llama tarjeta de elector (hoy también de identidad según me dijeron allí), me dijo la mujer que me recibía estos papeles, que no podía darme otro pasaporte porque mi nombre (que en mi tarjeta electoral aparece con dos nombres propios, como en mi acta de nacimiento), no corresponde con el de mi pasaporte.

Cuando me case hace apenas 31 años y renové mi pasaporte, escribí mi nombre propio (el que uso), omitiendo el segundo y con mi apellido de casada, ya que así se supone que me comencé a llamar después de que un juez en 1977 nos hizo firmar papeles en los que yo estoy legalmente casada con mi actual esposo. Lo malo es que hoy como me dijo el subdirector de esta delegación Tlaltelolco, el Sr. Carlos Sánchez, las cosas ya cambiaron.
Con éste individuo perdí mucho tiempo alegando que mi propio pasaporte aun vigente, era prueba contundente de que soy quien soy ya que ellos me lo han expedido durante toda mi vida.

El me alegaba que debía yo presentar otro documento además de este pasaporte "aun vigente", para comprobar quien soy y el papel mas legal hoy en este país, es la tarjeta de elector. Y vaya usted a saber porque, porque no puedo creer que en mi país (como ya ocurrió en el pasado), si se puede sacar un pasaporte falso o doble, no se pueda hacer lo mismo con casi todo.
Esto a aquellos que viven en países un poco mas avanzados en cuestiones legales y en donde se supone que las cosas deben facilitarse para que sus ciudadanos no pierdan tiempo productivo, les parecerá ridículo. Pero hoy siglo XXI, así funciona México y no parece que lo hará mejor. Mi país parece haberse quedo en el surrealismo con el que lo califico Andre Breton.

Resulta que aunque yo haya vivido con esta confusión que la misma Secretaria de Relaciones Exteriores originó, aceptando mi "supuesto error" hace 31 anos, ya no puede seguir así.
Entiendo perfectamente que las cosas tienen que ir cambiando y al haber mas ciudadanos, tenemos que ser mas precisos con nuestros nombres, pero lo que no me cabe en mi cabeza es que siempre los ciudadanos íntegros, que cumplimos con la ley, pagamos impuestos, etc, seamos los que pagamos los errores de todo y todos.
Porque aquellos que somos mexicanos sabemos bien que cuando nos equivocamos, la pagamos, pero cuando se equivocan los políticos, servidores públicos y personas que se encuentran en puestos de mando gubernamental, también la pagamos nosotros.

La solución que me daba el Sr. Carlos Sánchez, era que escogiera yo un nombre u otro. ¿Esto les parece congruente cuando parte de papeles legales en mi vida han sido con un nombre y otra parte con el otro?, pues a mi y a mi esposo no nos sonó muy razonable.
Entonces se me ocurrió que mi visa de Los Estados Unidos, tiene el mismo nombre que mi pasaporte y que con esta me podía identificar, pero este hombre me dijo que solo si la embajada de este país me otorgaba una copia apostillada de la visa.
Pues aquí me ven, dirigiéndome a dicha embajada y pidiendo este documento. Me miraron con cara de ¿what? y yo expliqué mi problema.

Ellos parecieron entenderlo perfectamente, pero me dijeron que este tipo de documentos no los otorgan para cuestiones legales en México porque solamente lo harían si el gobierno Americano lo solicitara. Lo entendí perfecto y en un dialogo corto y conciso, además de quererme ayudar estas personas, me sugirieron ir con un notario para que me hiciera un acta legal certificando ante testigos (que me conocen desde hace 20 anos), para que en general me sirviera en el futuro ante cualquier duda como ésta.
Así que después de casi una semana, aquí me tienen haciendo otra cita para volver a ir, solo que esta vez iba resuelta a no hablar con dicho director (personaje chistoso, que en todo momento recurría a la broma para salir del paso).

En esta ocasión, volví a hacer todo igual y me volvió a atender otra señorita mas amable y cordial, quien me dijo que esta acta no servia de nada y que seria mucho mejor que trajera mi acta de nacimiento original.
Yo le dije que no quería que me pusieran el nombre del acta original, porque podría tener problemas con mi visa de Tailandia o la de Estados Unidos, que no me complicaran más la vida y vieran la forma de resolverlo.
Además de que mi acta original, se encontraba hasta Toluca en una bodega desde que nos fuimos a vivir a Tailandia hace casi dos años.
Entonces me pasó con un señor de mas presencia y seriedad de nombre Rodrigo Aranda supuestamente el “Director de este lugar”.
Él, mas amable y con algún interés "al menos aparente", por ayudarme, me dijo que si traía mi acta de nacimiento, el haría lo posible para que se me hicieran los menores cambios en mi nuevo pasaporte.

Aquí tienen que ese mismo día, mi esposo y yo partimos rumbo a Toluca para sin comer, tratar de volver a meter mis papeles ese mismo día y no dejar enfriar la aparente buena voluntad de este Sr. Rodrigo Aranda.
Al regresar y volver a tener un nuevo problema con la señorita que en la mañana tenia cara de amable, pero que al correr el día, ya no se veía con la misma disposición. Pedí volver a hablar con este personaje que ya se había ido a comer "coincidentemente".
Resulta que no podía aceptar mi acta porque junto con esta, tiene que ir una copia que saqué en tamano oficio (en virtud de que el original tenía ese tamaño) y tenia que ser en tamano carta. Con esto, yo confieso que me encontraba al borde de un ataque de nervios como en la película de Almodovar y solo me embargó un deseo e impulso de recordarles a su familia y ancestros a todos estos funcionarios.

Porque al mismo tiempo que a mi me ocurría esto, a otras personas también les ocurría lo mismo, por diferentes detalles pero que como siempre ocurre en mi país, aguantan, aguantan y aguantan.
Una paciencia que yo confieso no tener ante tanta pendejada, ineptitud, falta de criterio y sobre todo VOLUNTAD.
Parece que en general no existe ésta voluntad en mi país y creo que es lo mas triste que constato.

Ante todo este estrés porque queremos salir del país el día 12 y ya tenemos reservaciones, olvide preguntar porque no me estaban dando ningún papel a cambio de mi total identidad, ya que les estaba dejando todas mis identificaciones aceptables en este país y desde luego mi pasaporte que por cierto, es el documento con el que me identifico en todo el mundo, porque como les dije a estos individuos: "saliendo de México esta tan importante tarjeta de "identidad", la pongo en un cajón para no perderla, porque en cualquier otro país del mundo, solo me podría servir para abrir la habitación de algún lugar en lugar de la llave!".
No me cabe en mi cabeza que el pasaporte que me da el gobierno mexicano, no es prueba absoluta de quien soy y de que es legal.
El Sr. Carlos Sánchez (el que siempre encontraba divertido esto), me dijo que era para que no vuelva a ocurrir lo que ocurrió hace anos con el hermano del ex presidente de México, Carlos Salinas de Gortari quien como muchos de ustedes ya saben se sacó doble pasaporte con otro nombre para abrir una cuenta en Suiza con dinero robado al país.

Cuando se lo comente al director Rodrigo Aranda le dije: “Mire, esto no tiene sentido porque supongamos que en vez de ser quien soy, fuera la hermana del actual presidente de México del partido PAN (el partido del supuesto cambio) y con mi celular ahora mismo le llamo a mi hermano o a su secretario particular, para que este lo llame a usted y le diga que no me entretengan porque soy la hermana del presidente, que desde luego que soy quien soy, ¿no me pasaría por alto todo esto?”. Me contesto que desde luego lo pasaría por alto!!!.
Esto suponiendo que la hermana, familia, amigos, etc, del presidente, hagan sus trámites legales como cualquier ciudadano común y corriente como yo.

¡Que tristeza hoy comprobar tantas y tantas injusticias nuevamente en este país! y más triste, darme cuenta que no me sorprendo ya de nada, porque ya estoy acondicionada a esperar que las cosas funcionen así.
Pero al otro día cuando me di cuenta de que no podría recoger mi pasaporte si no existía buena voluntad por parte de las autoridades, ya que no me dieron nada para este fin (ningún recibo de mi documentación), volví a llamar y en esta ocasión, después de unos 20 minutos de pasarme de extensión en extensión (ya que la que me habían proporcionado del director no era la correcta y este pareciera que se escondía de mi), me atendió la persona mas inteligente, sensata y amable que pudo aparecer tras la línea.

Este respetable trabajador publico de nombre Alejandro Reyes, me escuchó, analizó y resolvió mi problema en dos llamadas más que el mismo me hizo en el lapso de unas horas y además me prometió tratar de tener mi pasaporte antes de una semana (lapso que les toma hacer tan complicado cambio), explicándome porque llevaba todo este tiempo dicho cambio.
Porque paralelamente a este problema que seguramente de alguna forma resolveré, se maneja un escándalo mayúsculo por mal manejo de la policía de la capital mexicana que "supuestamente", queriendo detener el vicio y la diversión, entraron en un antro de clase media y donde por su negligencia murieron 12 personas, entre ellos vatios menores de edad. Para acabarla, cuando se les tomaron pruebas en la delegación de la policía, no presentaban ningún rastro de drogas. Pobres muchachos muertos y pobres de sus familias. De por si la muerte es un trago por el que nadie queremos pasar, ni nosotros mismos ni nuestros seres queridos, pero cuando sucede de una forma tan estúpida, debe ser doblemente dolorosa.

Sanuk